Todo en la naturaleza existe para trabajar a la perfección. Si observamos directamente nuestro mundo exterior, nos podemos dar cuenta que todo es perfecto. Todo existe de una manera sincronizada. Si observamos a los animales que nos rodean, podemos darnos cuenta del grado de exactitud con que la naturaleza trabaja. Las aves aprenden a volar solas; los animales salvajes tienen y alimentan a sus crias sin ningun manual. Las plantas buscan generalmente la luz como su fuente de energía. En el caso del ser humano, la naturaleza nos ha dotado del más maravilloso "equipo" que quizás exista en el universo: nuestro cuerpo y nuestra mente.
Por lo tanto, si nos ponemos a reflexionar detenidamente, veremos que nuestra constitución corporal y mental ha sido creada para vivir y cumplir una misión en ésta vida: la sobrevivencia.
sábado, 13 de diciembre de 2008
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